Marta, la del marcapasos, llamó a La Bombón Asesinote para pedirle que la acompañara a buscar agua bendita. La necesitaba urgentemente, dijo. ¿Que no hay en la iglesia de aquí?, preguntó Bombón mientras miraba el reloj que marcaba las siete de la mañana en punto. Demasiado temprano para un sábado de resaca adolescente. -No, wey. Hay que ir a buscarla a otro pueblo, yo creo que a Santa Restituta, que es donde tienen un atrio grandote con pila al estilo antiguo. Dice el sacerdote de aquí que quitaron la pila del agua bendita porque en estos tiempos es pecado desperdiciar el agua.
-No pos sí.- Bombón se quedó pensativa y soltó a bocajarro la pregunta a su amiga: -Oye tú, ¿Y qué a poco piensas sentarte en la pila? ♥